Estos pequeños frutos son de sobra reconocidos por sus propiedades antioxidantes, por lo que resulta muy benefiioso incorporarlos a nuestra dieta diaria. Además de poseer un sabor agradable consumiéndolas maduras y frescas, son fáciles de introducir en tartas, pasteles, realizar zumos, mermeladas y porque no dar un toque original a nuestras ensaladas.
Hoy queremos rendir un pequeño homenaje al arándano, ese pequeño fruto con gran poder, ya que muchos estudios indican que además de saber bien y ser un excelente complemento en la repostería, es un poderoso aliado para combatir la grasa y prevenir infecciones.
El arándano originario de zonas húmedas de Europa y América, crece de manera silvestre. Hasta hace bien poco, el que consumíamos, si lo consumíamos, nos llegaba de lugares tan remotos como Chile o Australia, pero cada vez van tomando mayor relevancia las plantaciones de arándanos que existen ya en España, especialmente las de Huelva y Asturias.
Nosotros tenemos la suerte de conocer a Juanjo, colega asturiano que tiene su propia plantación en Cabrales, Asturias. Desde su web, es posible hacer pedidos, que se envían a toda España perfectamente envasados.
Pedimos a Juanjo una buena cantidad, porque además de comerlos frescos, pueden aguantar en perfectas condiciones unas tres semanas, preparamos unas riquísimas mermeladas que ofrecemos a los clientes de nuestras casas de madera para el desayuno.
¿Cuáles son tus frutos rojos favoritos?
Pincha aquí en Cobres Rural y contacta con nosotros si quieres saber el secreto de nuestras mermeladas de arándano.
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